Disney es para vivirlo en persona, pero yo, quiero hablar de ello y así poder contar como viví esta maravillosa aventura. Es el mundo de las fantasías más soñadas, cada atracción hace que te metas como protagonista dentro de cada cuento. No sabría decir cual es mi favorita.

Una de tantas que me llamó muchísimo la atención -que algo te llame la atención en Disney no es difícil- es, it’s a small world un maravilloso mundo de muñecas representando cada una de nuestras nacionalidades, mientras cantan y bailan, de tal maravillosa y mágica forma que, ahora que es diciembre, el especial de navidad es un nuevo mundo fabuloso dentro de algo que ya es tan bello como Disney.  

 

Como también, Haunted Mansion, decorada en Diciembre con los personajes de Pesadilla antes de Navidad, con una proyección muy especial. Mientras escuchas los ladridos y ves los huesos de Zero fantásticas  plantas carnívoras te miran y tararean una melodica música muy propia del admirable Tim Burton. 

De camino hacia un cementerio donde Jack te da la bienvenida vestido de Papá Noel, ahí está Sally, apoyada desde su tumba, con sus manos en la barbilla mientras mira a Jack muy enamorada. Al salir te despiden una especie de ángeles con cabezas de calabazas malvadas tocando un instrumento de viento fantástico. Para terminar, entramos a una sala donde la navidad es la escena protagonista, hay una mesa gigante donde los fantasmas están comiendo, bebiendo y bailando a su alrededor.

-Hoy, siendo mi cumpleaños, el final de esta atracción es la reunión del té con el sombrerero loco mientras me dicen “ Merry unbirthay”-

De momento eres Alicia persiguiendo a un lindo conejito por wonderland, que, de camino a un laberinto con un loco juego de cartas vivientes y una malvada reina, vas viendo a unos locos gemelos y un simpático gato con una gran sonrisa que aparece y desaparece. 

Peter Pan te lleva volando durante una maravillosa noche sobre la ciudad de Londres con sus monumentos y viviendas perfectamente recreados e iluminadas cuyo destino es el maravilloso Pais de nunca jamás. Mientras Julián espera esta cola yo vi el castillo de la Bella Durmiente, una pequeña recreación de él, donde a través de diferentes cristaleras hay fantásticos libros de cuento cuentan la historia con imágenes muy reales.

Con Blancanieves rodeada de lindos animales te adentras en el precioso bosque, hasta entrar en la mina de los enanitos, y, de inmediato estás en un palacio terrorífico viendo beber a una mujer con rostro maléfico una pócima que la convierte en, ¡bruja! 

 

Encuentra a Jack Sparrow con alguna copa de más, mientras atraviesas el caribe en una barca donde eres testigo del día a día de los piratas, incluso presencias una batalla con cañones. Es una atracción completamente real en su recreación de personajes y paisajes. De igual modo que en la atracción de Indiana Jones, donde desde el primer momento eres sumergido en una especie de templo maldito. Vas a toda velocidad en un vehículo – como si atravesases una mina- en la que tenemos que sortear todo tipo de peligros y amenazas letales incluyendo la bola gigante que aparece al principio de en busca del arca perdida y donde que por supuesto no faltan las serpientes.

A Buzz Lightyear le ayudas a matar extraterrestres como si dispararas con la pistola de la PlayStation, pero en este caso apuntando a objetivos físicos con dispositivos electrónicos a todo lo largo del recorrido, además el coche donde vas montado tiene un marcador donde ves la suma de puntos de los extraterrestres que vas matando.  

Star Wars consiste en un simulador donde el público se introduce en una especie de nave intergaláctica acompañados por un animatronic de C3PO, proyectado en una pantalla 3D donde la plataforma va simulando los movimientos que realiza la nave.

Splash Mountain-una de esas atracciones donde puedes coger unos tickets fast pass que te dicen en que franja horaria volver para no esperar cola-. Es una divertida montaña rusa donde volvimos al atardecer, y, que nos mojamos bastante para ser diciembre… Luego, nos quisimos dar un paseo por el monorraíl y así también descansábamos un poco pero sin parar de ver el parque, ya que llevábamos desde las 8:00 a.m sin parar. Aquí la aventura fue corta, ya que hubo otro tren delante del nuestro que dejó de funcionar y no pudimos pasar hasta después de una hora cuando apartaron el monorraíl averiado. Este percance nos hizo llegar justo de tiempo al space mountain donde, a quien le guste las subidas y bajadas rápidas e inesperadas este tipo de atracciones lo vive al máximo, porque se trata de una montaña rusa por el espacio exterior, por donde pareces volar sin control y a oscuras, bueno, no totalmente a oscuras, porque se ven multitud de luces que simulan ser las estrellas del firmamento; es una maravilla.  

Rápido nos fuimos para ver el espectáculo de fuegos artificiales desde el castillo de la Bella Durmiente, pero por fuertes vientos fue suspendido. Entonces, mientras llegaba la hora de ver el espectáculo del lago fantasmic yo aproveché ese tiempo repitiendo en Haunted Mansion viendo de nuevo el fantástico mundo de Jack Skellington.

 

El espectáculo del lago Fantasmic fue la última y mejor maravilla. Disney, sin duda, es mucho más de lo que te imaginas. Siempre imaginé que sería impresionante y no supe cuánto hasta que lo viví. Yo, por completo, me sumergí en ello, fui niña, fui adolescente y fui adulta. Eres protagonista de cada cuento fantástico. Además, como fue mi cumple me dieron una chapita donde ponía mi nombre y “happy birthday”, ¡todo el parque me iba felicitando!

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